Desde que empecé con el tema de la acuariofilia siempre me ha sorprendido ver cómo la mayoría de iniciados en este mundo tan apasionante caen en unos fallos que se repiten casi siempre (que yo también cometí en su día), y que además son de muy fácil solución para tener peces más sanos.

Alejandro Martín 

Es por eso que en Azureus ponemos todo nuestro empeño en que tú no cometas esos mismos errores, porque nos gusta ver que los peces que ayudamos a mantener están en las mejores condiciones. Porque también hemos sido novatos cuando empezamos, y porque también cometimos estos fallos.

Así que aquí te presentamos una pequeña biblia, 7 trucos infalibles que harán que tus peces luzcan todo su colorido en muy poco tiempo y que además te costarán muy poco trabajo poner en práctica. ¿Empezamos?

1 – Todo comienza con una buena alimentación.

Y es que, como dice el refrán, «de lo que se come se cría». Muchas veces en la tienda veo personas sorprendidas por el colorido de algunos de nuestros peces  y que comentan que los suyos tienen los colores apagados y no se ven igual en su acuario. Mi siguiente pregunta siempre es ¿y qué les das de comer?; Y la mayoría de las veces la respuesta es la misma: las escamas que se venden en los botes.

¿Te imaginas una vida entera comiendo lo mismo? sí, sí, repite conmigo, ¿LO MISMO?. A mi me dan los siete males solo de pensarlo. Porque al final, aunque la mayoría de las marcas comerciales buenas suelen tener un mix de escamas en los botes de alimento para acuarios comunitarios, en muchas de ellas lo único que cambia es el colorante y ya está.

¡En la variedad está el secreto para tener peces más sanos!

Sí, tal y como lo oyes. ¿Por qué darle un solo tipo de comida cuando tenemos a nuestra disposición un variado increíblemente amplio para darle a nuestros peces? Alimentos especiales para herbívoros, omnívoros, carnívoros, alimento liofilizado de multitud de tipos, congelado… Hoy en día la variedad es casi infinita, y cada marca presenta además un montón de tipos diferentes de alimentación. Te puedes volver loco (literalmente) intentando comparar unas y otras. En nuestra tienda hemos probado un montón de marcas y, tanto por nuestra experiencia como acuariófilos en el pasado, como por nuestra experiencia actual tenemos un ranking de «alimentos favoritos» que hemos visto que funcionan de fábula en la alimentación cotidiana de nuestros peces, y que por supuesto te vamos a ir contando paso a paso.

El primer consejo que te doy con el tema de la alimentación es que tengas al menos 3 tipos de comidas diferentes disponibles siempre para darle a tus peces, ya sean marinos o de agua dulce. Ten siempre una dieta base, esa que utilizas la mayoría de las veces (al menos 1 ó 2 veces al día). Normalmente será una dieta a base de escamas o gránulos, algo fácil y que te lleve poco tiempo en el día a día.

Nosotros en Azureus aquí lo tenemos muy claro. Para esta dieta base utilizamos productos de Ocean Nutrition y de Seachem. Tanto para marino como para dulce.

Todo el variado de escamas de Seachem

Alimentos de Ocean Nutrition tanto para dulce como para marino

Alimento para peces omnívoros de fondo (corys, botias, etc.)

Alimento especialmente formulado por Ocean Nutrition para los herbívoros de fondo de nuestro acuario

En agua dulce, la presentación de escamas o gránulos para el comunitario de Ocean Nutrition es nuestro caballo de batalla en el día a día y es el que utilizamos desde hace muchos años. Y además lo utilizamos un montón de veces al día (a veces hay jornadas que alimentamos más de 6 y 7 veces). Pocas cantidades, pero muchas veces, pues así imitamos lo que los peces hacen en la naturaleza, que es picotear constantemente en busca de alimento.

¡Nunca des más alimentación de la que los peces puedan consumir en muy pocos minutos!

En el agua marina, los granos de Ocean Nutrition y las escamas de Seachem son sencillamente fabulosas. Y si a esto le sumamos el Masstick, ¡ya para qué queremos más!.

Y ahora viene la tesitura fundamental… ¿cuándo escogemos escama y cuándo el grano? Pues para ésta pregunta también lo tenemos claro: si tus peces se comen el grano, adelante con él. La escama es menos nutritiva cuando contacta con el agua porque pierde vitaminas en poco tiempo a medida que se va descomponiendo en el agua. El grano, por el contrario, tarda más tiempo en deshacerse y tiene mucho más contenido.

¿Y la escama para que la quiero? Para que todos los peces coman, así de simple. El grano es más difícil que llegue a todos los rincones del acuario, pero las escamas rápidamente revolotean en el agua del acuario y aquellos peces más tímidos podrán siempre encontrar alguna porción cerca.

Y ahora empieza lo bueno: tenemos 2 tipos más de alimentación para volver locos a nuestros peces. ¿Qué te recomiendo? Que escojas dos de la siguiente lista y los alternes con la dieta base:

• Alimento en escamas de diferente sabor y composición.
• Alimento congelado.
• Papilla congelada (sencillamente genial, pero contamina mucho el agua, ojito y al loro con los cambios de agua).
• Alimentos que se descomponen muy lentamente y que los peces pueden ir picoteando (como las tabletas de fondo, pero también hay versiones para todos los peces del acuario).

Diferentes papillas que tenemos en Azureus para alimentar a nuestros peces

Alimentación congelada tanto de dulce como de marino. A los peces les encanta. Cuidado al descongelara: el líquido que generan es una bomba de nitratos.

Las algas desecadas hacen las delicias de todos los herbívoros marinos (cirujanos, centropyges y gobios se vuelven locos)

El masstick, sencillamente genial. Y su versión seca: el dki. De las mejores alimentaciones para marino y encima «made in Spain

Al menos deberías ofrecer a tus peces una comida cada 2 días de este otro tipo de comidas. Lo mejor: dar en días alternos cada una de ellas. Te sorprenderás viendo cómo tus peces se comen con muchas más ganas ciertos tipos de comida (ahí ya cada especie es un mundo, y cada animal tiene sus gustos). ¡Y encima tendrás peces más sanos y te sorprenderás cómo se alimentan y cómo tienen preferencias!

Y no, no hace falta que compres todos los botes de golpe. Empieza con una buena dieta base y una dieta «extra» de esa lista. Y antes de que se te acabe ninguno de estos dos alimentos que ya tienes, consigue una tercera dieta con la que poder alternar las dos que ya tenías. Lo ideal es que siempre tuvieras a mano al menos 3 cosas diferentes para alimentar a los inquilinos de tu acuario.

2 – OBJETIVO: tener a 0 los nitratos.

La utilización de buenos test de nitratos te ayudará a controlarlos y mantenerlos a raya.

Si tienes nitratos en más de 20 partes por millón, lo siento mucho, pero vas a tener siempre problemas para que tus peces luzcan sanos, fuertes y bien coloridos. ¿Por qué? Pues porque los nitratos no son más que una contaminación del agua debido a la degradación de los compuestos orgánicos que siguen el ciclo del nitrógeno, y cuantos más acumules en tu acuario menos crecerán tus peces y más débiles estarán. Cuantos menos nitratos, peces más sanos. 

¿Cuál es el objetivo? Tenerlos siempre a 0 o casi. Si bien no es recomendable tenerlos a 0 patatero si tienes un marino con corales o un dulce con plantas (ya que tanto las algas que hacen simbiosis con los corales como las plantas consumen los nitratos como alimento para crecer), si tienes sólo peces o son tu prioridad, tu objetivo siempre es el mismo, no tener nada de nitratos.

Obviamente con este punto doy por supuesto que no tienes ni amoniaco ni nitritos en el acuario, y que además tienes una buena filtración biológica. Una analítica semanal no está de más nunca para saber cómo está toda la química de tu acuario.

3 – ¿Compuestos fenólicos? 

¿Cuándo cambias el agua de tu acuario y la echas un un cubo de color blanco, el agua tiene un tono amarillento? Si la respuesta es sí, es casi seguro que tienes taninos en tu acuario, pero me juego el cuello a que también tienes un montón de compuestos fenólicos.

Y es que dichos compuestos vienen por procesos de degradación de la materia orgánica, tiñendo el agua de color ambarino o amarillento al igual que los taninos. Y…. ¡sorpresa! ¡cuántos más haya, peor estarán tus peces! Sencillamente porque inhiben el crecimiento y el correcto desarrollo de los peces cuando hay mucha concentración de compuestos fenólicos en el agua. La solución es sencilla: aumentar la frecuencia de los cambios de agua. El objetivo final: tener peces más sanos cada día 😉 .

4 – Evita la superpoblación.

La superpoblación es difícil de manejar en entornos cerrados. Genera estrés en los peces y rápidamente poluciona el agua. Si no tienes sistemas de recirculación abiertos como el de la foto, es muy complicado mantener estos acuarios estables durante mucho tiempo.

Y es que la mayoría de nuestros acuarios están superpoblados y tienen demasiada carga biológica en su interior, esto es, tenemos demasiado animal vivo que genera demasiada materia orgánica que posteriormente se tiene que descomponer, empeorando la calidad del agua.

Además la superpoblación crea automáticamente más interacciones entre los animales y esto no siempre es bueno. Ahí van unas pocas razones por las que no deberías superpoblar tu acuario:

• Aumento de las interacciones / peleas entre individuos (la mayoría de las veces nada buenas, aunque sí que es verdad que en ciertos acuarios de cíclidos africanos se busca precisamente el superpoblar el acuario para que ningún animal pueda llegar a ser demasiado dominante).
• Aumenta la competencia para conseguir comida. Conclusión: peces delicados o tímidos tienen problemas para conseguir comida.
• Disminuye la calidad del agua si no tenemos un sistema continuo de cambio de agua.
• El estrés generado por la superpoblación hace a los peces más sensible a las enfermedades. ¿Tú dónde estás más cómodo, en el salón de tu casa o en un lugar abarrotado en el que allá a donde te muevas te vas a encontrar con alguien? Y sí, hay peces que necesitan estar en cardúmenes, pero una cosa es tener un cardúmen y otra muy distinta es tener 40 peces en un acuario de 60 litros.

5 – Sigue una rutina o automatiza.

¿No has notado que cuando tienes el encendido y el apagado de las luces automatizado con un reloj (y por favor, ¡no me digas que no lo tienes automatizado, porque es realmente caótico para los pobres animales!) los peces saben perfectamente cuándo se van a apagar las luces y buscan cobijo unos minutos antes? Seguir una rutina con la alimentación, los cambios de agua y la limpieza de los filtros es siempre la mejor opción de todas.

Es mejor dedicarle al acuario 5 minutos todos los días que 1 hora una vez a la semana. 

Un buen comedero automático te permitirá saber que tus peces están bien alimentados siempre.

Y todo el trabajo que te puedas quitar del medio automatizando tareas, no te lo pienses, hazlo en cuanto puedas. Cambios de agua, relleno automático de agua de evaporación, automatizar las tomas de comida de «dieta base» con un buen comedero automático. Si acostumbras a tus peces a unos horarios fijos, te agradecerán la rutina y verás cómo todo funciona mucho mejor en tu acuario.

5.1 – ¿No tienes automatizada la luz?

Si todavía no tienes automatizada la luz, ya estás tardando. Hoy en día un programador normal ronda los 3-5 € y un programador digital no suele pasar de los 15 €.  Ya no hay excusa. Mi recomendación: el programador digital. ¿Por qué? Muy fácil. Si alguna vez tienes un corte de luz el programador normal se va a desajustar de la hora que le hayas puesto (si no hay luz, no sigue corriendo el relojito, y si se va la luz durante una hora y media, ese retraso lo va a acumular el programador normal).

Con el programador digital esto no pasa. Programas exactamente la hora a la que se encienden y apagan las luces y si se va la luz, la mayoría aguantan 72 horas sin luz antes de desconfigurarse. Ahórrate trabajo e invierte en un buen programador. Duran años y tus peces te lo agradecerán.

¡Ah! y, por cierto, si todavía no has leído nuestro artículo de qué hacer ante un corte de luz, te lo recomiendo desde este mismo momento.

A la izquierda, un programador digital de luz, a la derecha, uno de los de toda la vida.

Y ahora, para hacerte ver cuán importante es tener automatizada la luz, vamos a hacer un pequeño ejercicio de reflexión: Imagina que estás en una casa con poca luz y que cada día te encienden y te apagan la luz a una hora diferente. Los primeros días lo aguantas como puedes, pero para tu reloj interno (ese que funciona según el número de horas de luz que tengamos al día) es un auténtico desastre, y está demostrado que al cabo de una semanas el estrés que produce esa situación es grande y puede desembocar en bajadas de defensa tremendas.

Y a tus peces les va a pasar lo mismo, por eso es mejor que esta parte tan importante la tengas automatizada. Tus peces te lo agradecerán y tú te quitarás de encima un pequeño trabajo que podrás invertir en disfrutar viendo a tus peces. ¡Y encima ya no te volverá a pasar lo de estar fuera de casa y acordarte que no has encendido la luz!

6 – No combines especies incompatibles. 

Una perogruyada tan grande como un templo es este consejo, lo sé. Pero ni te imaginas la de veces que en la tienda podemos ver casos de peces muy tímidos mezclados con otros de carácter agresivo o muy rápidos.

Me atrevería a decir que casi todos los días tenemos que hacer de poli malo y decir: no te lleves esos peces, que con lo que tienes te la van a liar. Y lo hacemos tan contentos porque para eso estamos, para aconsejarte y hacer que tu acuario vaya mejor. Meter escalares con neones no suele ser buena idea (a no ser que te quieras quedar sin neones oye), lo mismo que intentar criar guppys en un acuario lleno de tetras. O combinar Oryzias woworae  (un pez precioso y bastante tranquilo, por cierto) con barbos cereza, que son como un fórmula uno a la hora de comer.

También es cierto que aunque algunas especies sean compatibles, siempre puede salir algún individuo al que se le cruce un tornillo en la cabeza y le de por liarla parda en el acuario, pero suelen ser excepciones (y contra esos ejemplares, poco se puede hacer, más que lo que vas a leer luego en el punto nº 7).

No te cortes y pregúntanos, que estamos para eso, para ayudarte a seleccionar las mejores especies para tu acuario y para que tú tengas peces más sanos.

¡Cuidado! Los peces te ven perfectamente a través del cristal, y pueden comportarse de manera diferente cuando estás delante y cuando están solos. 

7 – Observa a tus peces

¿Es una obviedad, no es así? Pero muchas veces se nos pasa por alto sentarnos y revisar tranquilamente el comportamiento de nuestros peces. El consejo más importante que te puedo dar cuando hagas ésto es que no te pegues al acuario. Observa a tus peces desde uno o dos metros de distancia. Verás cómo el comportamiento de los animales es totalmente diferente. Y aún así los peces no son tontos, y en cuanto nos ven movernos delante del acuario, aunque estemos a distancia, cambian su comportamiento.

No sería la primera vez que hemos puesto una cámara a grabar el acuario y hemos descubierto a algún inquilino con conductas poco deseables (que persigue a los compañeros del acuario, que se muestra agresivo o sencillamente que en cuanto no se siente observado manifiesta comportamientos anormales en cuanto a flotabilidad o a posicionarse en el acuario).

Una vez que hayas observado a tus peces desde lejos, es el momento de acercarse al acuario y fijarnos detenidamente en si tiene algún problema en las aletas o en el resto de su cuerpo, para poder ponerle remedio (separar a los compañeros agresivos, trasladarlo a otro acuario o separarlo durante un tiempo para que recupere peso).

Espero que con todos estos trucos y consejos tengas unos peces más sanos, lustrosos y vistosos. Y recuerda que en Azureus estamos para ayudarte a mantenerlos así de bien, y nos encantará asesorarte con tus mascotas acuáticas.