Microburbujas en los acuarios marinos ¿Beneficiosas, dañinas?
Desde hace un par de años se ven en los foros de manera habitual acuarios de arrecife a los que se les «inyectan» microburbujas de aire durante un tiempo determinado a lo largo del día.
Como para casi todo, hay partidarios y detractores. Nosotros lo utilizamos de manera ocasional en nuestros acuarios en Azureus y los efectos que hemos visto son siempre positivos.
El método de las microburbujas en nuestros acuarios de arrecife quiere recrear el intercambio gaseoso que existe de manera natural en el mar, cerca de los arrecifes de coral, donde rompen infinidad de olas, creando multitud de burbujas que favorecen el intercambio gaseoso del agua del oceáno y del aire que tienen a su alrededor. Además, muchos partidarios de este método comentan que lo que hacen las microburbujas es recrear en el acuario un skimmer gigante con el que parte de la suciedad se oxida y otra sale a la superficie arrastrada por las burbujas.
Nosotros en Azureus creemos que si bien es cierto que después de los «baños» de microburbujas el acuario tiene un aspecto más limpio y el agua se presenta más cristalina (tras un rato después, no justo después), creemos que esto se debe al aumento de corriente, que remueve gran parte de detritus que luego son recogidos por los diferentes métodos de filtrado. Esta corriente a gran presión que se le inyecta al acuario con microburbujas hace que se pueda orientar hacia los corales sin dañarlos (va amortiguada por el aire que contiene, que ralentiza la corriente al empezar a ascender). Al ascender las burbujas remueven los detritus que haya alrededor de piezas delicadas. Si emplearamos la misma bomba pero sin inyectarle aire dañaríamos bastante el mismo tejido que tras las microburbujas se queda intacto.
No vemos muy claro que realmente haya un efecto de skimmación, como muchos aseguran, pues pese a que pueda ascender suciedad a la superficie, ésta vuelve a depositarse en el fondo al poco tiempo si no tenemos bien configuradas las bombas para que arrastren todo el detritus hacia la filtración mecánica.
Si que es cierto que el nivel de oxigenación mejora muchísimo durante el período de inyección de aire, aunque es un efecto momentáneo y pasajero (a nuestros acuarios nunca les viene mal, pues son muchos los acuarios de arrecife que tienen un déficit de oxígeno en sus agua y con ello tienen una acifidificación permanente que muchas veces se solventaría añadiendo bombas de aire en el sump). No podemos optar por este método como la fuente principal de oxigenación del acuario, ya que las microburbujas tendrían que ser constantes y repetitivas para que surtiera efecto y esto no queda estético ni funcional.
A este método le vemos, no obstante, varios puntos negativos:
1 – No conviene excederse en el tiempo en el que inyectamos microburbujas al acuario al cabo del día (como máximo sugerimos 15 min cada 2 horas, y no mantener más de 15 minutos seguidos nunca si las microburbujas son muy finas y el acuario se llena de ellas en cuanto las bombas se ponen a funcionar). ¿Por qué? Si hay un exceso de microburbujas los organismos vivos que hay en el acuario pueden verse dañados. Al principio las pequeñas burbujas se quedarán adheridas e las escamas y las aletas de los peces, pero si continúa el proceso durante largo tiempo podemos tener embolias gaseosas en el interior del sistema circulatorio de nuestros peces son los consiguientes problemas (es un problema muy infrecuente, pero puede pasar).
Los detractores de este método sobre todo utilizan este argumento para decir que las microburbujas no deberían utilzarse en los acuarios de arrecife, pero si se hace de manera racional no tiene ningún problema (si dejas 3 horas las bombas inyectando aire puestas, evidentemente, te has pasado…).
2 – El segundo punto negativo es simplemente estético. Regula las bombas para que no se pongan en marcha cuando estés difrutando del acuario, porque muy estético no es y luego durante unos minutos el agua está revuelta con detritus en suspensión.
Para inyectar el aire, conviene utilizar bombas de movimiento bastante potentes. Si solo se quiere limpiar una pequeña parte es mejor utilizar bombas tipo cabezales de poder que se utilizaban antiguamente para el movimiento de los acuarios marinos y de algunos filtros, pues dan mucha presión, inyectan mucho aire, pero la zona de propulsión de agua es muy limitada.
Si por el contrario se quiere llenar el acuario de microburbujas durante un tiempo, lo ideal es acoplar a nuestras bombas de movimiento de mayor caudal un aireador potente para que las burbujas sean pulverizadas por el rotors y se introduzcan en la columna de agua.
Si no habéis probado este método, desde Azureus os animamos a que lo probéis, pues con un uso correcto los resultados son siempre buenos y ayuda a mantener un poco más limpio el acuario. Y si tenéis alguna duda de las bombas a utilizar solo tenéis que preguntar 😉