Agresividad en Agapornis inducida por el celo

Nosotros en nuestra clínica, de manera cariñosa, los llamamos «pequeños demonios de Tasmania». Y es que estos pequeñines emplumados de vez en cuando se parecen mucho al de la serie de los Looney Tunes cuando empiezan a mostrar signos de celo. Es la agresividad en Agapornis inducida por el celo 🙂

Y como una imagen vale más que mil palabras, pues qué mejor que un vídeo para que sepáis a lo que nos referimos.

En el vídeo podéis ver a Blue, que está en pleno apogeo de hormonas y coge todo lo que pilla por banda para intentar hacer un nido. Además avisa cuando nos acercamos mucho con el fin de que no la molestemos. Y cuando esto no funciona, pues embiste como un toro de Miura. Esta agresividad en agapornis, y en otras muchas especies de psitácidas (loros) es hasta cierto punto normal. En animales no habituados al contacto humano (los que nos tienen miedo o respeto) no se ve tanto normalmente, aunque las hembras en los nidos pueden llegar a plantarte cara sin reparos.

La agresividad en agapornis no es la única entre los loros. Los amazonas y las cacatúas son famosos por su comportamiento agresivo e intolerante hacia su cuidador en época de apareamiento. En muchos casos, atacan a quien entre en el aviario y pueden llegar a producir heridasde consideración. 

En animales que han sido criados a papilla por personas, este miedo desaparece y los animales no dudan en atacar sin miramientos cuando nos acercamos al lugar que quieren utilizar como nido.

Si quieres evitar que la agresividad en agapornis vaya a más, puedes cambiarles de jaula o moverles sus juguetes dentro de la misma. Cuantos más papeles les des (o todo aquello que sirva para que los agapornis intenten formar nido) más estarás incitando al animal a fabricar un nido y más en celo estará tu mascota.

A muchas hembras les calma ligeramente que se les acaricie la zona del dorso y el obispillo (como en la foto), pero la amiga del vídeo no estaba muy por la labor y quería seguir a su oficio de reclutar todo lo necesario para hacer un buen nido  🙂

El mayor problema de las hembras en celo es el momento en el que comienzan a poner huevos. Y algunas pueden llegar a hacerlo sin control y sin síntomas de parar entre una puesta y otra. En estos animales es conveniente confirmar que no se estén descalcificando y, sobre todo, ofrecerles una dieta adecuada (por favor, dale un buen pienso, no le des semillas a tus agapornis mascota).

Las dietas ricas en grasas no hacen más que aumentar la agresividad en agapornis. ¡Intenta no ofrecer alimentos muy grasos a tus peques!

Además con una dieta rica en grasas (la alimentación típica e inadecuada a base de semillas que venden en la mayoría de los sitios) lo único que se hace es exacerbar la agresividad en agapornis. El exceso de grasa el animal lo interpreta como un signo inequívoco de que se presenta una temporada muy energética que es óptima criar a su descendencia. Por lo tanto, una de las cosas que podemos hacer para disminuir la agresividad bajando «el celo» es pasar a los agapornis a una dieta «light» a base de piensos bajos en grasas y proteínas.

Esperamos que estos pequeños consejos os ayuden en los periodos en los que vuestros agapornis se pongan un tanto agresivos en la época de celo. Y recuerda que en estos periodos los animales son más susceptibles de tener problemas relacionados con la puesta de los huevos. Si notas que tu agapornis está más agresivo de la cuenta y de repente tiene un rápido bajón en su estado de ánimo, se queda aletargado, se embola y/o no quiere comer, te recomendamos que lo lleves a tu veterinario de exóticos de confianza.

En nuestra clínica veterinaria Azureus estaremos encantados de ayudaros para cualquier duda o problema que podáis tener. 😉